La Recova. De frente a la peatonal, cerca al mar

El complejo incluye un desarrollo comercial en planta baja, pisos destinados a cocheras y departamentos, en un lugar privilegiado del centro de la ciudad.

“Edificio La Recova. Ubicado sobre la peatonal Dorrego, a apenas 100 metros de la playa, en la turística localidad de Monte Hermoso, este complejo edilicio propone ampliar la oferta de locales comerciales, cocheras y viviendas en pleno centro, con un proyecto que potencia un espacio que es paseo obligado de los turistas”. De esta manera presentan sus hacedores este ambicioso proyecto edilicio, promovido por inversores de la región.

Sin embargo, esos pocos renglones no alcanzan a definir en toda su dimensión una propuesta arquitectónica que busca fortalecer comercialmente uno de los paseos predilectos del balneario, que amplía la oferta de cocheras --hoy una de las necesidades más acuciantes del lugar-- y con un conjunto de departamentos resueltos con una superficie adecuada que, a través de su resolución, buscar sacar provecho de su cercanía al mar.

Una buena manera de armar la manzana

La peatonal Dorrego tiene hoy una particularidad: sus bordes carecen de construcciones, ocupada con locales individuales y aislados y un anfiteatro. Sus dos perímetros son muros, los cuales separan el paseo de los terrenos linderos, sin uso. Por eso el edificio propone un interesante aporte urbano, tanto en planta baja como por la masa edilicia en altura, que permite terminar de “armar” la manzana.

Es una obra que marca una presencia, con sus 105 metros de desarrollo y casi 35 de altura, organizada con un zócalo de locales, cada uno con entrepiso, cuatro pisos para alojar 100 cocheras y, completando la propuesta, cinco pisos para un total de 50 departamentos de uno y dos dormitorios, con amplios espacios comunes y zonas verdes en altura.

Las unidades se entregarán totalmente terminadas y equipadas, ejecutadas con materiales de primera calidad, especialmente elegidos para requerir un mínimo mantenimiento atendiendo el ambiente marino en el cual estará emplazado.

Las aberturas llevarán doble vidrio, cada unidad contará con calefacción individual y estará preparada para la instalación de fibra óptica. También contará con su parrilla individual y baulera. El acceso al conjunto será a través de un grupo de dos ascensores y habrá un tercero con ingreso independiente, exclusivo para las cocheras.

En el último piso se ubicará un Salón de usos múltiples y un espacio para disfrutar de una vista panorámica.

Un pensamiento para hoy y para el futuro

El arquitecto Alberto Del Viso estaba en Barcelona cuando recibió el llamado de uno de los administradores de La Recova para que desarrollara una propuesta para un terreno tan particular, de 80 metros de frente y 10 y 15 de fondo en cada extremo, de cara a una peatonal y con una cercanía al mar que no podía ignorarse.

De inmediato su libreta se comenzó a llenar de dibujos a mano alzada, croquis, perspectivas y colores. Google Earth le permitió visualizar con claridad el entorno existente, tanto en la manzana a ocupar como en las vecinas, con la voluntad de resolver el proyecto arquitectónico como un hecho urbano que mejore la ciudad.

“Imaginé un edificio que ocupara todo el frente disponible, que es mucho, y ordenar los 50 departamentos, cada uno con su cochera. No se podía recurrir a un subsuelo por las características del terreno”, señaló el profesional.

La decisión fue mantener la planta baja con carácter comercial, en diálogo con la peatonal, sumando la construcción de una recova que ofrece protección y sombra, de modo que la línea municipal quedará materializada por las columnas de ese espacio semicubierto.

A partir del segundo nivel -cada local ocupa planta baja y entrepiso— se ubicaron los cuatro pisos destinados a cocheras. “Esa franja forma un segundo zócalo, compacto, que de alguna manera viene a recomponer el borde de la manzana. Eso me pareció muy interesante porque hoy hay un paredón que le quita vida al paseo y le impide alcanzar todo su esplendor, es como un callejón. Con los locales y la recova modificamos esa situación.”.

La materialización de cocheras es clave para un centro que no dispone de muchas ofertas de estacionamiento y donde en la época de verano se generan serios conflictos de tránsito.

Por último quedaba por definir la distribución de los departamentos, 50 unidades de uno y dos dormitorios. “Para eso seguimos construyendo en altura, con una particularidad que no es menor: todos las unidades tienen una vista al mar, aunque en algunos es sesgada. Los colores del frente se inspiran en la variedad de colores que ofrecen las sombrillas en una playa”, explica Del Viso.

Al estar el edificio en una “segunda línea” en relación a la playa hubo que considerar que edificios podían obstaculizar esa visual. También apuntar a que la propuesta arquitectónica mantenga sus virtudes a futuro, imaginando como será el crecimiento del sector y que el edificio no deba resignar sus ventajas.

“Analizamos una posible configuración física del entorno en los próximos diez años. Para eso consideramos los edificios existentes e imaginamos los que potencialmente podrán aparecer, de modo que nuestra propuesta no quedara desencajada de lo que va a ser Monte Hermoso”.

La posibilidad de mirar el mar

Considerando que La Recova está frente a una peatonal y perpendicular a la playa, el diseño de los departamentos incluye un ambiente con terminación oblicua, diagonal, de manera que permite observar el mar.

“De modo que finalmente tenemos locales comerciales, cocheras y vista al mar. Y además mejoramos la condición urbana frente a la peatonal y recomponemos la masa edificada en altura de toda la manzana”, detalla Del Viso.

Un último detalle fue buscar que por ser un edificio de tanta extensión y altura, no aparezca como una placa ciega. Por eso su resolución propone espacios comunes abiertos y la posibilidad de generar allí pequeños jardines. También los palieres permiten disponer de vistas tanto a la peatonal como al mar.

El frente de los pisos destinados a cocheras tendrá una resolución especial, de manera de revitalizar la oferta del paseo.

La Recova se plantea entonces como un proyecto por demás interesante, innovador, de uso mixto y pensado en cada detalle para ser protagonista del lugar, potenciando lo existente y preparado para ser parte del desarrollo urbano futuro.