NORMAN FOSTER REMODELARÁ EL "CAMP NOU"
Finalmente, luego de un proceso que incluyó un concurso internacional con más de 80 participantes, una preselección de diez trabajos y una final con apenas dos candidatos, el arquitecto inglés Norman Foster impuso su diseño para remodelar y modernizar el mítico estadio de fútbol del Club Barcelona. Si bien Foster tiene sobrados pergaminos que avalan su trayectoria internacional, sin dudas su trabajo con la construcción del nuevo estadio de Wembley, en Londres, fue decisiva en la votación final.
El proceso de selección, definido como "abierto, participativo, democrático e internacional" por el directivo catalán Joan Franquesa, fue resuelto por un jurado integrado por representantes del Ayuntamiento, el Colegio de Arquitectos, del FC Barcelona y expertos en la materia, que analizó las propuestas finalistas del mencionado Norman Foster y del arquitecto catalán Carles Ferrater.
Franquesa destacó algunos de los requisitos valorados al tomar la decisión final, como por ejemplo que las obras no incidiesen en el calendario deportivo, que tuviesen un efecto mínimo sobre la masa social, que mantuviese la asimetría característica del Camp Nou y que se convierta en "un elemento icónico de la ciudad".
A pesar de que el nuevo estadio respetará la estructura básica del original, inaugurado en 1957, su aspecto exterior será diferente, generando un estadio que, aseguran, "transmite pasión" y hará que "los socios se sientan orgullosos".
Respecto al trabajo ganador, el propio Foster señaló que el mismo tenía cierta "influencia gaudiana" (en referencia a Antonio Gaudí, un símbolo del modernismo catalán), con una apariencia externa unificada producida por un mosaico inspirado en el trencadís distintivo de las obras de Antonio Gaudí, cuyo cromatismo toma como referencias el azulgrana del club barcelonés y el rojo y amarillo de la bandera catalana.
El exterior, como se mencionara, ofrecerá el efecto visual de un mosaico de color, sombras y reflejos, con un aspecto cambiante de día y de noche, y que podrá actuar como pantalla. Una cubierta de cables de acero prolongará este mosaico sobre las gradas. Interiormente, respetando la actual estructura de hormigón, el volumen integrará espacios e instalaciones añadidas, tanto funcionalmente como arquitectónicamente, mejorándose la circulación y la accesibilidad a los diferentes ámbitos del estadio.
"Éste era un concurso donde debía estar", declaró Foster tras haber conocido que su proyecto se había impuesto a los de cinco estudios internacionales y cinco nacionales. Señaló, además, la importancia que este tipo de obras tiene en el ámbito de la arquitectura.
"El fútbol es una fuerza muy poderosa que no distingue entre clases sociales, sino que las une. Por eso en un estadio, de una forma más democrática que en cualquier otro tipo de edificio, no sólo se trata de sentimiento, protección o acústica. No es solo eso, que por otro lado lo es todo. En nuestro mundo un estadio es una imagen global. Si crees que la arquitectura tiene una gran agenda social, además de estética, eres el encargado de crear el material para algo que se distribuye en imágenes por todo el planeta. Y en ese sentido un estadio es la mayor expresión de la arquitectura. De modo que sí, creo que hay una maravillosa conexión entre el fútbol y la arquitectura", apuntó.
Pese a las alusiones a la estética barcelonesa, Foster señaló que su cometido será producir un edificio que genere una imagen que pase a formar parte del imaginario del planisferio global.
La cubierta del estadio alargará el mosaico exterior sobre las gradas. Los colores del club también se podrán ver en el ala de la cubierta. La densidad de los colores se irá reduciendo hacia la parte interior del borde de la cubierta donde se doblegará hacia el cielo. La cubrición de la cubierta será ligera y translúcida, hecho de paneles de baldosas de policarbonato con color, fijadas en la parte alta de la superficie de la estructura de cables.
A la pregunta sobre como impactó el proyecto entrelos socios del club y los habitantes de Barcelona, los foros que se encuentran en internet son tan variados como contradictorios. Desde considerarlo una afrenta a la ciudad, hasta definirlo ya como su nuevo icono urbano.
Sobre gustos, se dice, no hay nada escrito.