Extrañas formas frente al Mar Amarillo
El estudio de los arquitectos Lundgaard & Tranberg, con sede en Dinamarca, ha ganado el concurso internacional para el nuevo museo arqueológico estatal en Rostock, Alemania. Con una superficie de 6.500 m2, la propuesta tomará forma como una robusta estructura revestida de ladrillo que se integra en su entorno, simbolizando fuerza y protección. Similar, metafórica y estructuralmente, a un “cofre del tesoro”, emerge para acomodar la distinguida colección arqueológica de la región del mar báltico, una historia que se remonta a 12.000 años.
Establecido junto al río Warnow, la propuesta redefinirá la relación entre la ciudad y el frente marítimo, transformando el área del puerto en un centro social. Por ello propone una conexión de su planta baja con las áreas exteriores, atendiendo a convertirse en un hito.
El museo albergará exposiciones permanentes y temporales, una cafetería, instalaciones para conferencias y una terraza con vistas panorámicas que se abren hacia la ciudad.
“Es un edificio notable, un punto de referencia en el puerto y cumple con los requisitos del museo, con un foyer y salas de exposición que funcionan muy bien”, mencionó el director del museo. Expresó, además, que “es fantástico contribuir al desarrollo de Rostock con un museo que mira hacia el futuro y al mismo tiempo se conecta con una tradición de arquitectura de ladrillo. También es espectacular crear un entorno protegido donde los objetos frágiles y sensibles a la luz puedan mostrarse al público”.