Un techo perforado para una plaza seca

En 2008, la firma japonesa dirigida por Junya Ishigami finalizó los talleres del Kanagawa Institute of Technology, en Atsugi, ciudad de la prefectura japonesa de Kanagawa. Ese mismo año recibió el encargo de diseñar, junto al edificio, un espacio de reunión y descanso para los estudiantes del campus universitario.

Con una superficie de 4.109 metros cuadrados, la propuesta es una plaza semiabierta que invita a los visitantes a sentarse en el suelo. Destinado también a acoger eventos, el volumen se adapta a la topografía y presenta una cubierta de hierro suavemente ondulada, apoyada sobre cuatro muros, generando un interior diáfano.

Rodeado de edificios educativos, el proyecto busca ajustarse a la escala humana y está concebido como un paisaje construido, donde las casi sesenta aberturas del techo dan lugar a un juego de luces y sombras y, en días lluviosos, crean pilares de agua.