Las propuestas son infinitas; hay que pensar qué es lo que se busca lograr y poner el ojo en todo aquello que nos puede servir para llevarlo a cabo. Además de la recuperación de materiales y objetos, otro recurso “low cost” es la utilización de elementos simples que nos ayudan incondicionalmente al momento de decorar, redecorar o darle una lavadita de cara a nuestro hogar o lugar de trabajo.
La utilización de materiales “low cost” pasó a ubicarse en la categoría de tendencia, ocupando lugares omnipresentes en determinados ámbitos. Productos como el contrachapado, el hormigón visto, el acero galvanizado y otros anteriormente empleados en un ámbito más industrial trascendieron al entrar en el circuito de los mejores creativos. Y para los más clásicos, es evidente que los materiales nobles conllevan altos costos por naturaleza, ya que se pueden conseguir acabados análogos a precios accesibles gracias a las mejoras en impresión láser sobre superficies más económicas, como porcelánicos, laminados y otros sintéticos.
Se trata de una forma actualizada del “menos es más” racionalista, pero esta vez sin limitar lo ornamental, sino lo superfluo, y ocupando un lugar privilegiado en términos de decoración. Consiste en utilizar la creatividad y el sentido común para lograr los mejores resultados, con los mínimos recursos y al alcance de todos.
Cuando la necesidad apremia y el presupuesto escasea, se impone el ingenio para crear un espacio acorde con nuestro bolsillo. Mínimas intervenciones a base de color en paredes y suelos pueden tener máximos resultados para el cambio de imagen de un espacio hogareño. A través de estas ideas de decoración podemos comprobar que una decoración barata es posible y muy sencilla.
La decoración para paredes
Las distintas opciones que tenemos para vestir las paredes pueden hacer que cambie radicalmente el efecto visual del ambiente. Colgar cuadros o lienzos pintados de uno u otro estilo dirán mucho del gusto de los propietarios y alegrarán las paredes en blanco o tonos neutros. Se recomienda que los cuadros llenen la pared, bien por tamaño o por cantidad.
Las técnicas de pinturas decorativas son otra alternativa para darle carácter a una pared, un techo o un mueble. Simulan mármol, estucos oxidados, acabados plata, dorado envejecido y ni que hablar del cobre de las cañerías antiguas.
Entelar una pared para darle presencia a un living o una habitación, vestir sillones o sillas, cambiar cortinas o crear accesorios como almohadones, muñecos, pompones, agarra cortinas, guirnaldas y demás es una buena alternativa. Las telas son nuestras aliadas cuando queremos volver un ambiente más acogedor o más elegante.
Apilar contenedores modulares de madera u otros materiales, y obtener una mesa escalonada donde colocar objetos personales -se recomienda que en la superficie se disponga de una lámpara o complementos que nos aporten iluminación y decoración-, hacen de las mesas auxiliares una de las estrategias más utilizadas, prácticas y versátiles.
Tenemos infinidad de opciones para reciclar, restaurar o comprar por poco dinero objetos que puedan hacer las veces de complementos. Los tan nombrados pallets son aliados infaltables del “low cost”. Posibilitan crear los más variados muebles, camas, sillones, estanterías y mesas para dentro y fuera de casa.
Los muebles y complementos de mimbre son baratos y su textura nos ofrece calidez y serenidad a cualquier decorado. Son muy utilizados en espacios al aire libre, pero en interiores consiguen cambiar el ambiente de cualquier habitación. Colocar muebles de mimbres solos o mezclados con otro tipo de muebles da un resultado jovial y alegre por poco dinero.
Son un recurso de almacenaje económico y fácil de encontrar que, gracias a su sencilla estructura y su facilidad para ser apilables, pueden tener múltiples usos. Han pasado de ser un simple elemento de transporte de frutas a convertirse en objetos deseados para darle un toque vintage a la casa. Pueden añadirse a la casa tal cual están, sin tratar, y así dar un toque rústico, o bien limpiarlas y pintarlas o decorarlas con papeles de colores. Se utilizan como separadores de ambientes, revisteros, estanterías para el salón, mesitas de noche, prácticos muebles auxiliares y sorprendentes maceteros para las terrazas. Se adaptan perfectamente a cualquier estilo y espacio.
Las manualidades que con un mínimo de materiales podemos conseguir son una buena idea decorativa. Utilizar objetos naturales. Una botella, el sombrero de un disfraz, los souvenirs de las vacaciones, los envases de los regalos u otras cosas en desuso pueden darnos opciones como la creación de una práctica lámpara de sobremesa, natural, sencilla y decorativa de un recibidor de estilo rústico.
Otro ejemplo para ahorrar y enorgullecernos de nuestra decoración es hacer de la pantalla de una lámpara sencilla y clásica, la protagonista de nuestro comedor, con la ayuda de cinta adhesiva, pegamento y unas letras impresas lograremos una composición agradable. Estas transformaciones se pueden realizar en objetos comprados o en accesorios que ya tenemos.
La creación de un rectángulo en color o tono diferente a la pintura de la pared donde vamos a colocar la cama nos permite realizar visualmente un falso cabecero “low cost”. Se trata de una propuesta ideal para los dormitorios de matrimonio modernos pequeños pues estos cabeceros no ocupan ningún espacio.
Definir un espacio dándole carácter, estilo y personalidad es tan sencillo como restaurar muebles heredados o adquirido en mercados. La decoración del recibidor es maravillosa con dos únicos muebles y el espejo antiguo de segunda mano restaurado con una capa de pintura en aerosol. La decoración “low cost” puede adaptarse con detalles y muebles baratos a estilos modernos, clásicos, rústicos o el que deseemos. Baúles, mesas, taburetes, sillas y señales pueden tener una segunda vida y darle alegría a la sala. Lo importante es recuperar esos viejos objetos que se tienen guardados y darle un aire vintage a nuestro hogar.
Las cortinas pueden ser fundamentales en la decoración de la habitación. Podemos transformar el aspecto y el ambiente del cuarto dependiendo de cómo vistamos las ventanas. Las cortinas baratas pueden ser perfectas.
Hay muchas formas creativas y originales de diseñarlas a mano, como por ejemplo utilizando hilo grueso y abalorios que tengamos por casa. Se puede utilizar cuentas, perlas y todo tipo de adornos de viejos complementos introduciéndolos en un hilo grueso y resistente, para conseguir así unas cortinas muy especiales.
También se puede utilizar otros materiales, como tapones de corcho, tapones plásticos y CD.
Para los que no quieren renunciar a la creatividad ni a la economía, podrán recurrir a botones para diseñar unas cortinas muy especiales. Inspecciona bien todos los rincones de tu casa; seguro encontrarás algunos accesorios fantásticos para diseñar unas cortinas divertidas y muy originales.
Los restos de tela son perfectos para la recuperación de almohadas, almohadones y otros elementos de costura de la casa. Si la tela está muy vieja se podrá hacer tipo “patchwork”, mezclando telas, puntillas y botones para darle un estilo vintage a los objetos.
Un espejo grande apoyado sobre el suelo de una estancia pequeña consigue ampliar espacios reducidos y las habitaciones parecen más libres. Los espejos pueden ser muy baratos y es un truco en la decoración de interiores chicos.
Actualmente la decoración con vinilos se convirtió en tendencia; con ellos todo son ventajas. La gran variedad de modelos, tipos, tamaños e, incluso, precios nos permiten cambiar el aspecto de cualquiera de nuestros ambientes: dormitorios, cocinas, baños, salones, recibidores, pasillos y ventanas.
Si lo que se busca es darle un nuevo aire al hogar, plasmando nuestra personalidad y, por supuesto, sin gastar mucho dinero, optar por una decoración “low cost” permite obtener grandes cambios con pequeños detalles.