Ambicioso plan para construir viviendas

nte los síntomas concretos de una retracción de la economía del país, que comenzaron a sentirse en distintos sectores, entre ellos el de la construcción, el gobierno anunció la implementación de un plan de créditos para construir vivienda única. El objetivo del mismo es edificar unas 100.000 unidades con préstamos otorgados por el Estado a tasas sumamente accesibles, que parten desde el 2% anual, y que variarían entre ese porcentaje y el 14% anual, a tasas fijas y variables. Con el plan se podrá acceder a un máximo de 350.000 pesos, a devolver en plazos amplios -se mencionó de hasta un máximo de 30 años-, y los beneficiarios que estarán en condiciones de solicitarlo deberán contar con ingresos inferiores a los 30.000 pesos mensuales. En principio se privilegiarán aquellos grupos familiares que cuentan ya con su terreno propio, aunque también serán utilizados terrenos fiscales de todo el país, buscando dar así solución a una problemática muy sensible para la sociedad -el techo propio-, mediante la inyección unos 20 mil millones de pesos a la economía a través de un sector sumamente dinamizador y generador de empleo genuino. Las expectativas despertadas con este anuncio fueron enormes. Según se expresó, el programa -denominado “Pro.Cre.Ar Bicentenario”- utilizará fondos públicos y prevé la creación de unos 200.000 puestos de trabajo, unos 100.000 directos y otros tantos indirectos, ejecutándose mediante la modalidad de fideicomiso. Los sectores que se beneficiarían con esta iniciativa son aquellos que normalmente “no pueden acceder a la vivienda o al mercado de crédito privado”, máxime ante la evidencia de una “falta de política hipotecaria de la banca privada” sobre este tema, tal cual mencionó la propia presidenta Cristina Fernández. Así, y retomando la iniciativa política durante el primer año de su nuevo mandato presidencial, la actual gestión gubernamental aspira a revertir parte del déficit habitacional crónico que arrastra el país. Esperemos que esta vez se cumplan los anuncios, que estén disponibles los fondos necesarios para concretarlos, para que no suceda como con otras propuestas, que mencionaban que los argentinos podrían acceder a su vivienda propia con poco más que lo que costaba un alquiler, quedando éstas sólo en promesas vanas.

Ing. Ricardo R. Kloster
Director