El sitio de la construcción del sur argentino

Agosto 2011 - Año XXI
Diseño Exterior

Pérgolas, Glorietas y Toldos

Los jardines de invierno, pérgolas, galerías y glorietas, más que una simple extensión de superficie, son lugares privilegiados, abiertos hacia el exterior, que hacen partícipe a la naturaleza en lo cotidiano y crean una nueva manera de vivir, luminosa y despreocupada. La idea es disfrutar de un espacio de transición entre la vivienda y el exterior, y gozar de éste, sea cual fuere la estación del año o las condiciones climáticas. La construcción de un jardín de invierno se basa en ganar metros cubiertos con una obra seca de ajuste sencillo y rápido.

U

na manera muy fácil y accesible de generar un ambiente de este tipo es instalando una pérgola, que además de ser útil, ayuda a decorar dicho espacio.

Las pérgolas fueron pensadas para brindar sombra y proteger de la lluvia y el viento; es por eso que pueden colocarse de manera aislada o bien adosadas a una pared, siendo éstas las dos opciones más utilizadas.

>

Se utilizan, además, para crear y separar ambientes o realizar entrepisos de diversos usos (dormitorios, pequeñas oficinas, terrazas, etc.) y proteger zonas de paso en un espacio abierto. También pueden colocarse en edificios, en zonas de circulación de peatones, para unir pabellones, instalarse en las puertas de los edificios como marquesinas, orientadas hacia sitios abiertos como piscinas o terrazas o, simplemente, como estructuras autónomas en su totalidad, que brindan refugio y sombra en el recorrido de un camino.

Los estilos de las pérgolas varían mucho y se adecúan a los distintos gustos personales, adaptándose perfectamente a cualquier tipo de espacio.

Construcción de Pérgolas

En el momento de construir una pérgola se debe tener en cuenta una serie de pasos para lograr un resultado óptimo.

Para comenzar, se evalúa el lugar donde será colocada. Si es sobre terreno natural, deberá analizase la consistencia del suelo, debiendo ser firme ya que en él se anclarán los postes. Si la consistencia no fuera suficiente, será necesario la realización de cubos de cemento (pueden estar escondidos bajo tierra), que brinden la mayor sujeción posible, siempre protegiendo el poste de la acción corrosiva del suelo sobre los materiales, más aún sobre la madera, que para soportar la acción de la tierra debe estar tratada con autoclave.

Luego se trabajará en la forma o el diseño de la pérgola, sea que se apoye contra una pared, o si va a ser una construcción libre dentro de un espacio propio. En el primer caso -utilizando la pared como apoyo-, los estribos serán de gran ayuda en la sujeción, sin necesidad de encastrar una viga. Para estos casos, la combinación de acero y madera se presenta como la opción más estable, fuerte y estética. Una de las ventajas de estas pérgolas es la integración con la construcción preexistente, así como la caída de agua, que se hace en un solo sentido, simplificando los trabajos. Esta aplicación permite ahorrar dos postes y dos paneles laterales, siendo una opción más económica que una pérgola aislada.

Las cubiertas pueden ser clásicas, como las de madera más trabajada, o de líneas más sencillas y sobrias, como pueden ser las de hierro, aluminio y vidrio. Un tipo de estructura de estilo básico son aquellas que constan de vigas en una sola pieza, a las que una vez montadas se les pueden agregar diversos elementos decorativos para personalizarlas, como ser las de madera laminada que quedan muy bien cerca de una piscina. Actualmente, una estructura que permite un rápido montaje y adaptabilidad, se realiza en perfilería de hierro o aluminio.

Otra decisión es determinar la apertura o luces en algunas de las paredes/laterales de la pérgola. Pueden resolverse, a su vez, cerrándolas, usando cerramientos de celosía, cortavientos, cortasoles o totales.

- Las celosías se utilizan sobre todo en las terrazas de los pisos de las ciudades, ya que desde la azotea de otros edificios puede verse el interior de las mismas.
- Los cortavientos pueden ser alternados con celosías para cerrar zonas demasiado expuestas a las corrientes de aire.
- Los cortasoles sirven para dejar pasar una parte de la luz solar que incide sobre algunas zonas del exterior. Entre sus vacíos se pueden enredar plantas que, además de refrescar, dan sombra e incrementan su valor decorativo.

En cuanto a las uniones, se puede escoger entre varias formas de unir los pilares a las vigas y luego a las viguetas.

Por último es necesario definir si necesitamos o queremos alguna cubierta. A tal efecto pueden utilizarse plantas trepadoras con un fin meramente decorativo. En caso de querer una pérgola cerrada, se puede colocar un machimbrado de madera que se vuelve muy vistoso desde el interior, o también utilizar un tablero fenólico, como opción sencilla y económica, que aporta sombra.

Independientemente de la opción de cubierta de madera elegida, siempre debe colocarse algún material para preservarla de la corrosión o humedad del ambiente y, en todos los casos, la cubierta deberá estar inclinada en un ángulo que variará en función del material seleccionado.

Aparte de los techos de madera existen diferentes variantes. Las más comunes son: policarbonato, chapa transparente, de vidrio armado o laminado utilizados por sus cristales que resisten perfectamente los impactos del granizo. En estos casos, la función es la impermeabilización del ambiente, permitiendo el paso de la luz. También están los de cañas y actualmente, está muy de moda instalar toldos de lona y telas.

Luego de evaluar los pasos anteriores, resta adecuar la pérgola al destino y presupuesto de cada usuario.

Toldos para pérgolas

Los toldos para pérgolas pueden ser de diferentes materiales y tipos, dependiendo siempre del uso que se le dé al ambiente donde se coloque.

Los más económicos y sencillos son aquellos que se sujetan con tensores a los postes de la pérgola. Por otro lado, están los de un precio más elevado, que poseen un armado mucho más complejo.

Para terrazas y balcones quedan muy las lonas tipo cortina, que se colocan de manera suspendida en una guía en el techo, y poseen un sistema especial que permite correrlas de un lado al otro.

Los toldos pueden clasificarse de la siguiente manera:
- Con pendiente: se utilizan en ventanas y terrazas con techo, como las urbanas, siendo el toldo de punto recto el más habitual. Cuando está abierto, los brazos forman un ángulo recto con la fachada. Otro tipo, cada vez más utilizado, es el de brazo invisible, así llamado porque los brazos desaparecen ocultos bajo la lona cuando están abiertos. A diferencia del anterior, los brazos dejan de ser un estorbo para el paso.
- En horizontal y vertical: el primer caso consiste en un toldo tenso u ondulado que se instala como cubierta de una pérgola. En el segundo, tiene una caída vertical y ofrece protección frente al aire y los rayos del sol, con lo que se gana privacidad.
- Automatizados: se accionan mediante un motor con un pulsador o mando a distancia, haciendo más sencilla la tarea de extenderlos y recogerlos, debido a que generalmente son de mucho peso. Pueden llevar un temporizador para programar las horas de apertura y cierre, de modo que esté abierto antes de llegar a casa, con lo que se reduce la temperatura en el interior y el consumo de aire acondicionado. También hay células fotosensibles, que detectan el grado de la luz a partir del cual puede accionarse la apertura o cierre de estos toldos.

Pérgolas para piscinas

Si dispone en su casa de una piscina, sin duda podría ampliar sus prestaciones como lugar de recreación colocando una pérgola que brindará protección contra los factores climáticos, optando por aquellas que cubran total o parcialmente la pileta.

En el caso de cubrirla de forma parcial, se pueden generar lugares entre la piscina y el jardín donde se puede cubrir del sol y dedicarlo al esparcimiento con mayor comodidad. Dependiendo de la ubicación de la piscina, la pérgola podría estar amurada en una pared lindera o directamente de forma independiente a la estructura de la casa.

Se puede optar por varios tipos de techos para este destino. Si se elige cubrir totalmente la piscina se obtendría una protección de gran calidad para los días de intenso sol, además de brindar protección extra para mantener la calidad del agua. Se tendría que optar por techos móviles en materiales multifilares, que son ideales para permitir el paso de luz solar con menor intensidad.

Para este uso se recomiendan las pérgolas de perfil de aluminio, ya que son durables y livianas, y cuentan con la posibilidad de incursionar en varios tipos de techados y estilos en las mismas.

Estos lugares generan verdaderas sensaciones de confort, creando una mezcla perfecta de lujo y comodidad en el caso de disponer de mobiliario, como ser reposeras y mesas, entre otros.

Pérgolas Cenadores o Cenadores Cubiertos

El “cenador” es similar en estructura a una pérgola. Se compone de cuatro o más postes de sustentación del techo que tiene como fin la generación de un espacio de sombra debajo de la estructura. Pero en estos casos, la cubierta es completa, además de impermeable, por lo que el área debajo de ella queda protegida en su totalidad.

Lógicamente, esta diferencia está justificada ya que el fin de su construcción es poder utilizar luego la habitación, ya sea en un té a la tarde, o bien para almorzar o cenar cómodamente, sumándole algún mobiliario, ya sean sillas, mesas o muebles de jardín y así aumentar el confort.

Es usual que al construir un cenador, el suelo o pavimento del mismo sea distinto del que hay en áreas próximas.

Los materiales de los mismos dependerán, en gran medida, de la integración al hogar que se quiera dar, la localización y el entorno de la estructura, la disponibilidad de los materiales necesarios y, por sobre todo, del gusto del usuario.

Aquellos cenadores con destino en comercios son, generalmente, de tres paredes en blanco, que proporcionan la privacidad necesaria, y vidrio expuesto en el frente para la atención al cliente, lo cual es conveniente para los propietarios dependiendo de la ubicación del comercio.

Pérgola para terrazas

Cuando una vivienda no posee un jardín y se quiere lograr un espacio externo donde disfrutar al aire libre los días y las noches, la mejor opción es convertir la terraza en un ambiente más de la vivienda, generando un espacio de sombra, y la manera más sencilla de hacerlo es colocar una pérgola.

Para este destino, las pérgolas más elegidas son aquellas que poseen una estructura que se compone por columnas que luego serán el sostén de un toldo o de otro tipo de techo. Sus laterales, generalmente, se dejan abiertos, y el piso en el cual se instalará podrá ser de madera -tipo deck-, generando así una agradable sensación de continuidad del espacio.


Secuencia constructiva de un pergolado


Home | Costos | Blog | Ediciones Anteriores