El sitio de la construcción del sur argentino
Indice Revista
- Arquitectura y visual para Torre del Parque
- Plusvalías constructivas una forma de lograr ciudades modernas y equitativas
- Sistema Constructivo con Alma de poliuretano
- Vidrieras más atractivas, negocios más rentables
- La importancia del mantenimiento de ascensores
- Normativas municipales para el control de fachadas y balcones
- Para verte mejor: reflectividad en el camino
- Las catástrofes se ilustran con iconos
Noticias y Novedades
- Terrazas en las afueras
- Obras raras: los nilómetros
- La “más codiciada” de Suecia
- China y un puente invisible
- Seis finalistas para el Guggenheim Helsinki
- Cruce ideal (real)
- Cuando el arte se viste de Prada
- Calatrava y Disney
- Obras menores que visten bien
- Refugiados de mejor forma
- La Torre Eiffel cada vez más verde
- Nueva vida al Zoo
Vidrieras más atractivas, negocios más rentables
Una buena forma de atraer nuevos clientes, sobre todo en zonas comerciales donde es masiva la fluidez de gente, es contar con una vidriera atractiva para el consumidor. Un frente colorido, elementos llamativos y una buena combinación de diseño brindarán una imagen positiva del negocio y estimulará el ingreso de público.
Para lograr la atracción de los consumidores es necesario tener en cuenta algunos consejos de decoración en fachadas:
- Una buena decoración: Una forma de hacer atractiva la fachada de un negocio es procurándole una buena decoración, recurriendo, por ejemplo, al uso de letreros, carteles o afiches que, además de ser elementos que “visten” el lugar, permiten promocionar los productos y mostrar las ofertas. Para completar una fachada comercial pueden usarse, también, objetos relacionados con la temática del lugar, luces de colores, plantas (siempre teniendo el cuidado de mantenerlas en buen estado), etc.
- Una vidriera atractiva: Es aquella que muestra productos novedosos y llamativos, cuenta con una correcta iluminación que los destaque, resuelve una adecuada disposición de los mismos, y está permanentemente limpia.
- Limpieza permanente: Una fachada comercial con falta de mantenimiento y limpieza ofrece una muy mala imagen del negocio; además de dar la impresión de ser poco higiénico, descuidado y austero. Por lo que siempre debemos tener limpia la fachada, lo cual incluye las paredes (las cuales deben ser pintadas regularmente), el piso, la vidriera, los carteles, las plantas, los elementos decorativos, etc.
- Buen uso de carteles y afiches: Usar carteles o afiches con los principales productos, precios y promociones, además de ser una buena forma de decorar la fachada, permiten estimular el ingreso de los consumidores al local.
- Un consumidor podría tomar la decisión de ingresar a un negocio si ve un cartel con los precios de algunos productos; mientras que, por otro lado, podría decidir no entrar si no sabe los precios o las promociones que éste ofrece.
- Entrada que facilite y estimule el ingreso: Una entrada oscura, demasiado estrecha o bloqueada por algunos adornos u otros objetos, podría ser una barrera psicológica para el consumidor, mientras que una entrada iluminada, amplia y de fácil acceso estímula y facilita la decisión de ingresar al local.
- Diferenciación con otros locales: Si las fachadas o frentes de varios negocios cercanos tienen cierta similitud, una forma de llamar la atención es teniendo una fachada diferente que se destaque de las demás. Para ésto puede recurrirse a un diseño original, combinación de colores llamativos, uso de carteles luminosos, etc.
Publicidad creativa
Durante los comienzos de la publicidad de masas (allá por los años ‘20 del siglo pasado, aproximadamente), ésta se limitaba casi exclusivamente a informar al posible consumidor sobre las características objetivas del producto o servicio que se ofrecía. Sin dudas, en este sentido los cambios han sido radicales; en la actualidad, las estrategias publicitarias intentan captar la atención de los compradores de una forma mucho menos racional.
Hoy en día estamos más que acostumbrados a ver campañas publicitarias de todos los estilos, colores y tamaños; reclamos que tratan de conectar con nuestro lado más emocional y subconsciente (hay campañas publicitarias que ni siquiera hablan ni enseñan el producto en cuestión). Lograr ésto no es nada fácil, hay que recurrir a altas dósis de creatividad e ingenio.
La definición de creatividad publicitaria abarca dos elementos importantes: el subjetivo y el material.
El primero hace referencia al proceso mental mediante el cual, el creativo publicitario aplica sus conocimientos, crea formas, ideas, situaciones y todo aquello que es producto de su inventiva y que surge como el resultado de un proceso mental. Por tanto, siendo el resultado del ejercicio cerebral del publicista, deberá conjugarlo necesariamente con los antecedentes informativos o aprehensiones hechas sobre el producto o servicio sobre el cual debe aplicar su labor.
El segundo elemento es la ejecución de esas ideas en la realidad objetiva. Por ello, todo lo que crea el publicista deberá, necesariamente, ser aplicable a la realidad, encontrando también limitantes en los aspectos económicos, sociales, legales, etc.
De lo expuesto anteriormente se deduce de manera inequívoca que la palabra creatividad, aplicada a la definición de creatividad publicitaria, no abarca con máximo esplendor toda su connotación o significado, por las limitantes que encuentra el creativo publicitario en el ejercicio de su labor.
La capacidad creativa muchas veces nace con el ser humano. Se habla, entonces, de talento innato, pero también se puede lograr su desarrollo y perfeccionamiento a través del estudio serio y profundo de las diferentes técnicas aplicables a la materia. Aun cuando el creador publicitario tenga talento innato, será necesario que lo perfeccione con el estudio de especializaciones afines a estas profesiones.
Más allá de las tendencias del momento y las propuestas tradicionales, la publicidad exterior siempre ha sabido manifestarse a través de fórmulas capaces de convertir los anuncios en auténticas muestras de perspicacia.
Arriesgada y, en muchos casos, extremadamente innovadora, la publicidad en edificios y fachadas, en sus diferentes formatos, técnicas y soportes, nos han dado ejemplo de cómo la creatividad e ingenio en su máxima expresión pueden ser los ingredientes secretos para lograr generar un gran y sorprendente impacto en los consumidores.
El término “Publicidad Exterior” se refiere, de manera general, a las muchas y variadas formas de medios en donde se exhiben mensajes publicitarios a la audiencia, mientras ésta se encuentra fuera de casa.
Básicamente existen tres tipos de anuncios publicitarios exteriores, de acuerdo al tipo de soporte que utilizan:
- Cartelerías: Son estructuras metálicas, construidas sobre terrenos o azoteas con un plano vertical sobre el que se coloca un anuncio para transmitir un mensaje publicitario a las personas que transitan por calles, avenidas y carreteras. Por efectos prácticos, se procura que las áreas de exhibición tengan tamaños estandarizados, para facilitar la producción y operación de los anuncios.
- Transporte: La publicidad en transportes ofrece una opción económica para llegar a un público urbano en movimiento.
- Mobiliario Urbano: Son marcos construidos expresamente para la exhibición de anuncios publicitarios dentro de inmuebles con un considerable tráfico de personas colocados en paredes, pasillos, relojes, pantallas de información, etc.